El norte de Italia lo tiene todo: gastronomía exquisita, paisajes idílicos, un legado artístico y cultural excepcional y buen tiempo. Una de las mejores formas de conocer esta región es haciendo un viaje en auto. Si estás planificando o imaginando tu próximo viaje, ¿qué te parece la idea de alquilar un auto y recorrer una de estas rutas de ensueño del norte de Italia?
Los lagos italianos

Lago de Como
No hay palabras que describan la belleza de los lagos italianos. Explorá los pueblitos que rodean al lago de Garda, donde encontrás casas en tonos pastel, decoradas con canastos llenos de flores y postigos. O interrumpí el viaje en auto con un paseo en barco para ver desde el agua las casonas de estilo neoclásico que adornan la ribera del lago de Como. A lo lejos, se ven las montañas cubiertas de bosques de cipreses y las terrazas de cultivo con olivos y limoneros. Podés ajustar el itinerario como más te guste, ya sea que quieras pasar una semana recorriendo Garda o un día paseando en auto por los 70 km de la costa sur del lago de Como, parando en pueblitos encantadores, como Bellagio. Reservá una noche en el Palazzo Albricci Peregrini en Como. Es un buen punto de partida para recorrer el lago.
Los Dolomitas

El paso Pordoi
La Grande Strada delle Dolomiti es un camino de 182 km que serpentea entre los increíbles picos de granito de la cadena montañosa de los Dolomitas. La ruta va desde la ciudad de Bolzano hasta el pueblo Cortina d'Ampezzo, pero podés dividir el trayecto como quieras. Te recomendamos no apurarte y dejar tiempo para hacer desvíos o caminatas por lugares espectaculares y paradas en puntos panorámicos desde donde vas a poder apreciar los paisajes. Preparate para ver castillos, glaciares, monumentos naturales impactantes como el paso Pordoi y lagos cristalinos de aguas turquesas, que contrastan con el gris del granito. Empezá tu viaje con una estadía en Goldenstern Townhouse, un bed and breakfast en Bolzano.
De Milán a Roma

El paisaje de la Toscana
Este camino conecta a la capital de la moda italiana con la verdadera capital de Italia y, a medida que lo recorras, vas a poder ver algunos de los tesoros más distinguidos del país. El trayecto dura seis horas si manejás sin paradas, pero es mejor dividirlo en varios días. Hacé una parada en Bolonia, una ciudad popular entre la gente joven por su universidad (conocida por ser la universidad más antigua en funcionamiento continuo del mundo). Probá el ragú con parmesano rallado fresco, un plato que se originó en esta ciudad. Después, visitá Florencia para una dosis de arte y arquitectura renacentistas. Pasá por Siena, una ciudad mágica en la Toscana, y conocé la Torre del Mangia en la Piazza del Campo, la plaza principal. Cerrá tu recorrido en Roma y alojate en el Hotel Vilòn.
De Venecia a Milán

Casas de color pastel al lado de un canal en Burano
Para empezar, pasá algunos días sin auto entre los canales soñados de Venecia, paseando en góndola o conociendo las islas de Murano y Burano. Después, salí a la ruta con dirección a Padua, donde encontrás otra de las universidades más antiguas del mundo. También podés ver algunos de los frescos de Giotto en la capilla de los Scrovegni, que se consideran de los más relevantes del mundo en términos históricos. Tu próxima parada debería ser Verona, hogar de Romeo y Julieta y de la Arena de Verona. En este anfiteatro romano, construido en el año 30, ahora se llevan a cabo conciertos de ópera y de música pop. Comprá una entrada para ver un espectáculo y pasá la noche en Verona. Al día siguiente, manejá hasta Milán y cerrá tu viaje en auto con una estadía en Moscova Luxury B&B.
De Turín a Florencia

Los pueblos costeros de Cinque Terre
Si te encanta conocer lugares turísticos, esta ruta es ideal para vos porque te da la oportunidad de visitar las atracciones más emblemáticas de Italia, desde las terrazas coloridas de Cinque Terre hasta la Torre de Pisa.
Si bien no es recomendable manejar en Cinque Terre, podés estacionar el auto y caminar por los senderos que te llevan a los pueblos costeros, con casas en tonos pastel que decoran las colinas. También hay mucho para ver y hacer en Turín, donde podés empezar tu viaje (y alquilar un auto). Podés visitar Lucca, que queda de paso, y ver la torre de la iglesia sobre la cual crece un árbol; una imagen que realmente asombra. Llegando a Florencia, hay monumentos imponentes que son de visita obligada, como el impresionante Duomo y el Ponte Vecchio (o Puente Viejo), un puente medieval. Terminá tu viaje a lo grande con una estadía en Corte Calzaiuoli Elegant Suites.
Si necesitás una playlist para el camino, o si querés mentalizarte para tu viaje, esta selección de canciones italianas te van a transportar a un verano en el bel paese.