Mi nombre es Juan y provengo del mundo de la Publicidad y Relaciones Públicas y del Diseño Gráfico y soy un enamorado de la pintura y del Arte. Por eso junto con mi hermana Violeta, nos hemos encargado personalmente de toda la decoración, desde la creación del logo hasta la mayoría de detalles que ilustran nuestro alojamiento. Por otra Violeta estudió un Master en dirección y gerencia de Hoteles con Encanto en Rusticae. Así entre los dos, decidimos crear un concepto de alojamiento original y diferente, que nos definiera y donde se cumplieran tanto estéticamente como en la gerencia todos nuestros sueños e ideas. Cada año hemos ido aprendiendo y hemos intentado mejorar todo lo que ha estado en nuestra mano para dar el mejor servicio, cuidar los detalles y sentirnos orgullosos de lo que ofrecemos.

La Princesa y el Guisante es un alojamiento singular, un lugar original y muy especial. Se trata de una antigua casa totalmente remodelada con sólo 11 habitaciones. Cada una de ellas está equipada con su televisión, aire acondicionado, baño particular y conexión Wi-Fi gratuita. Sin duda es distinto a los demás alojamientos de la zona por su original decoración. Estamos situados en el centro del pueblo, muy cerca de la playa y también de la zona recreativa más turística. En nuestra terraza para uso exclusivo de nuestros clientes tenemos un solarium con jacuzzy y unas increíbles vistas para que puedan relajarse mirando la playa de Conil. Ofrecemos todo tipo de recomendaciones e información para que la estancia sea perfecta. Hace ya casi 8 años que gestionamos el alojamiento, y cada día aprendemos un poquito mas, nuestros clientes son sin lugar a dudas los que más nos enseñan.

Estamos situados en pleno casco antiguo de Conil, muy cerca de la playa de los Bateles y rodeados de multitud de bares y restaurantes. Así que es perfecto para ir a la playa a pie, enfrente se encuentra la playa del pueblo con sus chiringuitos y sus clases de kite surf, y hacia la izquierda cruzando un puente tendréis acceso a la playa que conecta con El Palmar que son unos cuantos kilómetros de playa virgen mucho menos transitada e ideales para realizar grandes paseos en un entorno natural y único. Por otra parte nuestra ubicación nos permite salir a comer o tomar algo por la noche sin la necesidad de tener que coger el coche, todo un lujo teniendo en cuenta los problemas que eso conlleva. También considero que ésta parte del pueblo es la más especial porque es la más antigua y a su vez la que tiene más interés turístico. Estamos muy cerca de la "Torre de Guzmán" y de "la Chanca", un espacio cultural y de exposición que ha sido recuperado y rehabilitado en los últimos años.