El trato del personal en concreto de Hélder fue maravilloso Sitio tranquilo y espectacular con unas vistas increíbles

Se alojó en febrero de 2024

Por poner alguna pega, el ruido de los niños en la piscina, y que está resulta pequeña si hay muchos huéspedes alojados

Destacable la amplitud del alojamiento de dos habitaciones, con tres baños y una terraza enorme. Todo nuevo, limpio y de calidad.

Se alojó en agosto de 2023

No tengo nada malo que decir.

Todo perfecto. Hélder es un anfitrión de 10 y la casa estaba muy limpia y perfectamente equipada.

Se alojó en julio de 2023

Nada, todo perfecto.

Todo.

Se alojó en julio de 2023

Todo perfecto,nada que objetar

El lugar un paraíso de paisaje y tranquilidad. El anfitrión Hernes hace de la estancia con sus detalles sentirse como en casa . Muchas gracias por todo.

Se alojó en junio de 2023

Terraza de lujo con vistas impresionantes . Dueño amable y una casa acogedora para hacer una escapada. La piscina da la vida en días de verano.

Se alojó en junio de 2023

Nada, estaba todo genial

El desayuno, en la terracita del estudio y con las vistas.

Se alojó en febrero de 2023

nada

espacio y limpieza

Se alojó en octubre de 2022

Todo muy bien

Todo estaba muy limpio. El personal muy amable. Camas muy comfortables, mucho silencio. Desayuno más que suficiente. Preciosas vistas. Desde allí visitamos ponte da barca, ponte de Lima, Viana do Castelo, zonas del peneda gérés y sistelo. No se puede pedir más. Lástima que nos llovió.

Se alojó en octubre de 2022

todo muy bien nada que no me gustase

sitio tranquilo para desconectar y bien conectado para hacer las EcoVias de vez y lima

Se alojó en septiembre de 2022

No tengo quejas ning6

Un sitio excepcional para pasar unos días. El apartamento muy limpio y bonito. El anfitrión Helder excepcional, sin duda vamos a repetir más años.

Se alojó en agosto de 2022

Nada.

Todo, pero especialmente la terraza, ideal para desayunar o cenar.

Se alojó en agosto de 2022

Nada

El apartamento y el desayuno, que nos lo dejan en la puerta del apartamento cada día para que podamos desayunar bien pero con la comodidad de hacerlo en el propio apartamento, que es muy amplio y con una terraza con vistas al valle increible

Se alojó en mayo de 2022

Cuesta trabajo encontrar algo con lo que no estuviésemos a gusto. Elegimos la zona para conocer el parque nacional de Peneda-Gerês y, para ese propósito, Crasto cae tan a trasmano como cualquier sitio, ya que se nos imponen el recortado perímetro del parque, la complicada orografía y la tortuosa red de carreteras. El alojamiento está relativamente cerca de Lindoso, Soajo o Sistelo, pero acceder a Castro Laboreiro ya es dificultoso, así que no hablemos ya de Xertelo o Gerês. Por pedir, pediríamos algo de cartelería para no confundirnos en el laberinto de carreterillas desde la estrada nacional a la quinta. Aunque hay que reconocer que las indicaciones que te da el dueño cuando reservas y la localización en Google Maps son impecables.

Habíamos reservado un estudio pero, por razones técnicas, nos dieron un gran apartamento, prácticamente a estrenar y muy amplio, gran atalaya para otear el valle a través de sus amplios y numerosos ventanales. En el salón, una enorme TV, cómodos sofás, mesa de comedor con sus sillas y, adosada, una cocina completamente equipada. Si entramos en el baño, moderno y funcional, encontramos las magníficas toallas portuguesas y una ducha que hace lo que tiene que hacer sin reproche posible. En cuanto al dormitorio, decir que la cama es confortable (puede que, para algunas personas, las almohadas sean un poco bajas) y que el resto del mobiliario permite distribuir el equipaje sin problemas. No tuvimos necesidad de calefacción ni de refrigeración, así que no podemos opinar, pero de la WiFi no tenemos queja. ¿Qué decir del desayuno? En la despensa teníamos leche, zumo, cereales, biscotes. En el frigorífico, mantequilla, mermelada, queso (tranchettes) y embutido. Sobre el poyo de la cocina, una máquina de café con sus cápsulas y una cajita con bolsas de té. Y, lo mejor, todas las mañanas nuestro amable anfitrión nos traía una bolsa de tela con dos panecillos y dos pasteles (que iban variando) por persona. Y a la llegada nos esperaba una botella del buen vinho verde que el propio Helder obtiene de los viñedos de su propiedad. Hablando de anfitrión, Helder, resultó ser un hombre muy agradable y amable en su justa medida, servicial pero no servil, obsequioso pero no meloso, atento pero dejándote tu espacio e intimidad. Buen conocedor de la zona y siempre dispuesto a ayudar. Por lo demás, una zona muy tranquila donde se descansa a gusto.

Se alojó en mayo de 2022

La amabilidad y disposición del propietario, así como la amplitud y comodidad del alojamiento y los maravillosos desayunos. Una amplia terraza con magníficas vistas. La tranquilidad del lugar para descansar y desconectar.

Se alojó en marzo de 2022

La casa está muy bien acondicionada y el trato recibido de lujo. Es muy recomendable

Se alojó en enero de 2022

Las vistas y el desayuno muy completo.

Se alojó en octubre de 2021

Nada, todo perfecto.

Una casita encantadora cerca de Ponte da Barca. Dos dormitorios dobles, cada uno con un baño en suite, una cocina pequeña pero perfectamente equipada, un salón comedor espacioso y, lo mejor, una terraza maravillosa donde desayunamos cada día (e incluso cenamos algunos). Nosotros nos dedicamos a hacer rutas de senderismo y a visitar sitios, pero incluso tiene una piscina donde refrescarse si hace mucho calor. Los dueños nos dejaban cada día pan y bollería fresca y la nevera estaba surtidísima con todo tipo de productos para unos desayunos pantagruélicos, incluyendo una botella de vino de su etiqueta y una compota casera deliciosa. Un 10, imposible darles menos puntuación.

Se alojó en agosto de 2021

Tanto la ubicación como el establecimiento han resultado fantásticos. Todos los dias recibíamos una bolsa con pan y pastelitos variados para desayunar, tras haber pasado una noche realmente tranquila en unos colchones estupendos. El menaje de cocina en perfecto estado, incluso leche, jamón, queso, cereales, yogures, zumo, sal, azucar, aceite, vinagre completaban todo lo que puedes necesitar en tu estancia. Como extra, una botella de vino de la propia finca que encontramos delicioso. El propietario muy amable y pendiente de que estuviéramos a gusto. Nos llevamos un recuerdo estupendo de la estancia en una zona fantástica de Portugal, y nuestro hijo pequeño (4 años) nunca olvidará la piscina :)

Se alojó en julio de 2021

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Se alojó en abril de 2024

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Se alojó en mayo de 2023

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Se alojó en abril de 2023

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Se alojó en febrero de 2023

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Se alojó en enero de 2023